SEXTO MICRORELATO DEL CONCURSO

EL POBRE QUE DESPUES FUE RICO.

La ley igualitaria donde los ricos no son tan ricos ni los pobres son tan pobres. Si es verdad pero yo soy eso un pobre y no tengo nada, así que eso es un refrán tonto- vino diciendo el pobre.

-¡Quiero dinero, quiero dinero!

Pero nadie le hacía caso.

El pobre se fue a una caja que era su casa.

No tenía nada que comer. Por la mañana aparecieron cinco ricos por el pueblo. El pobre les pidió dinero y le dieron 3.000 euros y el pobre se fue corriendo a comprar su casa nueva.

 L. Ocaña (Escúllar)

LAS HISTORIAS DE MI ABUELA

La ley igualitaria donde los ricos no son tan ricos ni los pobres son tan pobres. Eso mismo me dijo mi abuela esta tarde porque una vez le pasó una cosa parecida.

Me dijo:

-Te voy a contar que cuando tenía 18 años, por mi gran talento de cantante, me hice rica pero... Alguien me dijo que ser rico no lo era todo, así que decidí donar todo ese dinero a una familia que era pobre. Desde aquel día dejé de ser tan avariciosa y todo ese dinero que ganaba no me lo quedaba.

-¿Entonces qué hacías con él? Le pregunté yo.

-Lo donaba a una escuelita pobre.

Y es otra de las historias que me cuenta mi abuelita cuando voy a llevarle pan, miel y leche al bosque; porque ella está muy mayor y malita.

Ilinca Damián (Doña María)

EL  DESEO DE EMMA

La ley igualitaria donde los ricos no son tan ricos ni los pobres son tan pobres, porque así el mundo y las personas serían mejor, deseó Emma junto al árbol de navidad que cubría el rincón frente a la ventana. Las luces del árbol parpadeaban en un fondo cubierto de nieve. Un agradable aroma salía de la cocina y Emma se relamía los labios. Sonó el timbre y ella con timidez abrió la puerta, y descubrió a su familia que venía a cenar para celebrar la navidad, y entre abrazos y sonrisas iban entrando y felicitando la navidad.

A medida que la noche transcurría, todo acabó. Y los familiares de Emma se marcharon, sus padres se quedaron dormidos en el sofá, y entonces Emma vio una sombra, ella temerosa se escondió pero entonces escuchó un sonoro:

-¡Hou, hou, hou! Entonces Emma salió de su escondite y abrazó al hombre y entonces le dijo a la pequeña mira a la estrella más bonita y pide un deseo, Emma fue corriendo al balcón y deseó que en el mundo hubiera justicia.

S. Alcalá (Nacimiento)